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Porfirio Barba Jacob (Santa Rosa de Osos, 1883 - Ciudad de México, 1942) fue el principal pseudónimos del periodista y poeta colombiano Miguel Ángel Osorio Benítez. Porfirio Barba Jacob era hijo de Antonio María Osorio y Pastora Benítez. A los 23 años, tras mudarse de de Antioquía a Barranquilla, publicó sus primeros poemas, y tras hacer amigos en los círculos literarios, decidió trasladarse a Monterrey, México, junto con algunos amigos. Es en esta época cuando cambia su nombre real -Miguel Ángel Osorio Benítez- por el de Porfirio Barba-Jacob, que conservó hasta su muerte. En Monterey fundó la Revista Contemporánea y fue jefe de redacción del periódico El Espectador. Sus crónicas de periodísticas incomodaron al gobierno, lo que hizo que -en 1914- tuviera que trasladarse a honduras. A partir de ese momento su vida fue un continuo y penoso peregrinaje por diferentes países de hispanoamérica. Vivió en Guatemala, Honduras, Costa Rica, El Salvador, Cuba, Perú y México, prosiguiendo su labor periodística y literaria. Porfirio Barba Jacob, tenía una personalidad descarada y escandalosa, tanto en sus posicionamientos políticos como morales. En sus visitas a Cuba, conoció a Federico García Lorca, y simpatizó con los fundadores de Partido Comunista de la isla. Se declaró abiertamente homosexual, y cultivó la leyenda al rededor suya, como poeta errabundo, adicto a la marihuana y al alcohol, y propenso al escándalo. Porfirio Barba Jacob, murió en 1942 de tuberculosis en la Ciudad de México. Cuatro años después, en 1946, el gobierno de su país trasladó sus restos mortales a Colombia. La obra de Porfirio Barba Jacob se caracteriza por el empleo de un estilo modernista anacrónico, con términos y expresiones de gran nobleza, pompa y sonoridad, pero con un ritmo emocionante, sincero y lleno de musicalidad. Sin duda su obra se vió muy influida por Baudelaire, auqne en ciertos momentos se aproxima más a la belleza formal de Darío, lo que le convierte en uno de los grandes poetas en lengua española del siglo XX. Entre los títulos más importantes de su obra poética se encuentran: Rosas negras (1932), Canciones y elegías (1933) y La canción de la vida profunda y otros poemas (1937). Editorial Renacimiento ha publicado en el año 2013 su antología poética, bajo el título de Rosas negras; prologada por Luis Antonio de Villena.